Jardín de Al’ Andalus

Sobre la obra

La España musulmana, sobre todo en la época postcalifal, desarrolló en poesía, música y danza las formas más exquisitas y depuradas de la cultura islámica del momento. Paniagua, pionero en este terreno, rinde aquí homenaje a los ambientes festivos de las cortes andalusíes: el goce de los sentidos, las armonías musicales, los ritmos de la percusión y el movimiento del cuerpo femenino. Un espectáculo cargado de sugerencias que en ocasiones combina cuerpo y sonidos en un ejercicio casi de malabarismo.

Una gran variedad de ritmos y de instrumentos de percusión, apoyados por instrumentos melódicos, que crean un diálogo musical espontáneo, creativo e inteligente. El latido de los instrumentos acompaña al latido del corazón de los oyentes, que no pueden evitar el movimiento de sus pies o de las palmas de la mano durante el concierto.